miércoles, 5 de enero de 2022
sábado, 18 de septiembre de 2021
Chatiamentos con Mandarina
Yo: mandarina
Natalia: la telepatía
le estaba escribiendo una breve carta hace un rato
la telepatia
y eso q q se debe la carta
que asunto tiene
N: la vida
Yo: jaja
N: contándole cosas
Yo: que pequeño asunto
y en donde anda?
N: Chía
y ud?
Yo: en tabogo
y ya salio de examenes y esas cosas?
N: noo mano
empezando finales
Yo: y en esas epocas no atiende visitas?
N: no muchas
jajaj
pero podemos vernos la otra semana
en Bogotá
Yo: valex
N: lo invito a un té en el apato
Yo: chevere
y hablamos de Asunto: La Vida
N: eso
Yo: listo cuadramos
voy a ir a comprarle una botella de agua a mi mama q esta por aca
hablamos entonces
N: bueno, mandele saludos y digale que....
Yo: y espero la correspondencia
N: ...mis papas compraron yogurt griego y dijeron que está más rico que de cosntumbre
Yo: listo
N: un abrazo
Yo: ok
miércoles, 15 de septiembre de 2021
Carta de Monoica para mi
9 de marzo de 2008
...Dejando atrás los días encantados del perro y tomando con fuerza los días del águila.
Nace una nueva mariposa
¿o es una de las mismas con otro color en las alas?
Dicen que cuando una oruga está en el periodo de transición para metamorfosearse en mariposa, (por que quién ha dicho que la mariposa deja ser oruga y no oruga-mariposa y que desde que nace la oruga es mariposa también), allí resguardada en su capullo las alas comienzan a formarse. Colores y formas de ojitos, rayitas, líneas curvas que parecen trazos de pincel, formas fantasmagóricas envueltas en gamas luminosas, se determinan. Dicen que el hecho de que una forma color o rayita sea una y no otra depende del espacio donde la transformación sucede. Y así alas de tigre, azules, rojas, cafés como tierra, alas con ojos que parecen mirar, salen y presentan a la nueva mariposa otorgándole al ser que nace de nuevo un medio, una herramienta, un armadura para vivir, y hacer vida.
Siento que ha nacido una mariposa. No creo que sea del todo nuevecita, separada de las mil y una conversaciones, inquietudes, vida hablada, caminada, refrescada con agua escondida en la montaña. Más bien es una de las mismas con otro color en las alas.
Me gusta el camino que hoy se presenta. Me llena de emoción, aunque también de nuevas incertidumbres que se atan a las nuevas certezas. La casa.
Cómo, para qué, por qué? La vida esta haciendo un llamado para hacer otras cosas. A ser valientes y tomar riesgos.
Su valentía me tiene feliz. No lo imaginé, no lo esperaba tan pronto. Después de tanto bla bla bla entre los caminos, hoy te arriesgas a construir un espacio. De eso se trata, del hecho de ser más que en la mente y en la palabra.
Mil preguntas vienen ahora detrás de la decisión tomada, mil tácticas y mil estrategias van a presentarse para la construcción de ese nuevo territorio. Cuál tomar, cómo hacer…de nuevo son preguntas que merecen soluciones rápidas. La pregunta que mas necesitaba ser pensada ya se pensó. Ahora lo que se viene es un brillante horizonte de posibilidades. Qué si hay nubes negras? Claro que si, pues un horizonte es horizonte con todo. Hay que aprender pues a escoger los colores pa pintarlo.
Ahora tal vez quien sigue en el bla bla bla soy yo. Quiero pues decirle de corazón que cuenta conmigo, que mis manos y cabeza están pues pa ayudarle a construir. Presento, pues, hoy mis pinceles a su servicio. Al servicio de la casa, de la tierra y de la nueva vida. Y aunque mi vida está más comprometida con los espacios de la Orinoquia, al final creo que el compromiso es el mismo: Construir nuevos espacios en los cuales nos podamos comunicar mejor como seres humanos, como seres vivos relacionados con la tierra.
Compromiso frente al cual hay que dejar de lado el miedo. El miedo nos limita, nos sitúa en categorías que nos empobrece, que determina y encierra la capacidad que en verdad me gusta de los seres humanos: la capacidad creativa e inventiva. La naturaleza humana que en verdad nos hace pensarnos frente al mundo.
Pa brindarle al espíritu y al cuerpo el espacio para que viva este mundo de otra manera. En libertad de los miedos a hacer otras cosas, y en la autonomía necesaria, que llenita de aprendizajes, nos ha de llevar a estar en armonía y coherencia con el “todo”.
¡Que viva la valentía, la libertad, y, así como usted la llama, la revolución de la recocha, que creo yo no es otra cosa sino la vida. Entonces pues Don Pablo: pues que viva la vida donde vuelen las nuevas mariposas!
Reciba usted un abrazo de mi parte, mil bendiciones para el camino que en estos días se construye, y de nuevo mucho amor para que guie nuestras acciones.
Monoica.
sábado, 12 de junio de 2021
Bon Voyage mon Amie
A los pocos días de llegar a Concepción, resulta que en esos merodeos en los que la vida lleva conoci a quien fuera quizá una persona que ya había conocido. Apareció de puras cosas del destino en la bandeja del Facebook, en el cuadrito de “quizá conozcas”, “Jane Jones”, “0 amigos en común”. Me pareció una mujer feliz, atractiva, sexy, y reflejaba en mi aquella mirada que reconozco de personas que están ya escritas en alguna página de mi vida. Le puse “agregar”.
La revelación
terminó siendo conjurada cuando me enteré de un grupo de impro que se reunía en
un centro cultural de la ciudad conocido como el C3. Fui. El primer día dos chicos
me dieron la bienvenida, me presenté, y se presentaron, Hermes y Marco. A los
pocos segundos una chica se quitaba un gorro negro elegante y me saludaba,
Cony, rápidamente y sin mucha introducción, Marco dinamizó el momento, y entró
al salón otra chica, de pelo negro y sonrisa, “holi, soy Fer”. Y empezó la
impro. Para la segunda sesión Marco preguntó quién quería ir a un bar a
improvisar, me sonó y no dude en ir, pues era lo que realmente yo quería, al
escenario y sin trucos.
Semanas después
me inscribí a un taller y clase magistral de teatro con el método de Jacque
Lecoq. Lo hacía Lore, una mujer artista y campesina, graduada en "la Mancha" una de las universidades mas reconocidas del mundo en dramaturgia. Con Lecoq habíamos compartido hace poco en Tarapacá,
leyendo el Cuerpo Poetíco. En ese taller aprendí de Lore que el movimiento del
molino es uno de los movimientos base que dice Lecoq que componen todo el
universo de los movimientos. Fer fué al taller, Lore vivía en
la casa de Fer, al final cruzamos una conversación: “contactémonos por face” le
dije “ya estamos… Jane Jones”.
Lo que vino luego
fueron los grandes momentos del Laboratorio de Improvisación. Un laboratorio de
reacciones alquímicas, locuristicas y llenas de corazones fogosos. Una banda de
guerreros y guerreras que se pusieron la camiseta por hacer de los Lunes un día
divertido en Concepción, una ciudad que se caracteriza más por su bohemia e
intelectualidad que por su espíritu jolgorioso. Fueron horas y horas de
entrenamiento, presentaciones en el Lihuen, plazas, y hasta una en Casa de
Salud. Vivimos momentos de conexión y mucha inspiración, otros de desconexión, pero
siempre estuvimos ahí para el otro. El grupo era una explosión de jolgorio y
grandes comedias, auspiciadas por el mismísimo inventor y comandante de la
nave: Marco. Secundado por talentosos y fogosos improvisadores. Cada lunes
había carrete porque había impro en el Lihuen, los miercoles había carrete
porque había entrenamiento, el siguiente lunes igual, y el miércoles igual. La
pasamos bien.
Pasaron los meses de gloria y vinieron las implosiones y explosiones correspondientes, normales quizá en la vida de cualquier grupo, pero no tan normales si son el estallido social de 2019 y la pandemia de 2020. La maquinización de la humanidad prendió motores, e hizo que mucho de nuestras vidas migrara a la irrealidad del internet. Al principio de la pandemia, tomé una posición desafiante frente a la idea de estar encerrado y cagado del susto porque nos vamos a morir. Había que hacer todo lo contrario, encontrarse a improvisar. La idea de improvisar tomaba un carácter revolucionario. Ahora más que nunca quise improvisar, hacer arte, teatro.
Si esta impro iba
a resucitar era con Fer, volver a meterle enredadera a la cosa. Con Fer unimos
fuerzas para encontrarnos y entrenar casi cada semana en la UdeC, las plazas
de la remo y el apartamento de Fer, en medio de cuarentenas, control policial y la hecatombe correspondiente. Tuvimos bastantes sesiones de impro, aprendí mucho de
Fer, recibí su sabiduría y conocimientos. En algunas sesiones compartimos con Cony,
Marco y Hermes. Sin pretender, ni esperar nada, con la certeza de saber que reunirnos
a improvisar era un motivo suficiente. Me siento feliz de haber tenido
la oportunidad de compartir con Fer esta última experiencia. Y ya que me ha
dicho que se va a ir a viajar, no me queda más que recurrir a estas palabras
para conjurar una despedida. Bon voyage mon amie.
sábado, 8 de mayo de 2021
Antes de hacer yoga escribo...
Antes de hacer yoga escribo, reencontrarme con la voz, con lo que construyo o pueda inventar, hacer el esfuerzo y no escabullirse en las aguas de lo que se hace porque se hace y no se sabe porque se hace, cuando esto es lo que es. Resultase que en estos momentos de pasar los días jugando con Tomi y Abril me doy cuenta de lo afortunado que soy. De compartir este tiempo con mi familia, en una convivencia bella, siempre amable y llevadera. Siendo así mis días desde que me levanto y hasta que me acuesto, después de ver piratas, dragones, universos, agujeros negros y pj masks revolotear encima de la imaginación de Tomi, a veces no llego a entender lo que estoy viviendo, me obnubila esto de ser papa, de ser quien imagina a un hijo bailarín y matemático, lo digo de manera metafórica por supuesto, nunca literal, porque te libero hijo mío de mis expectativas, de lo que yo me imagine que eres, se tú mismo, siempre, eres bendecido.
Y mientras tanto
Abril hace sus primeros pasos, ya corre, se ha pegado en la cabeza, debo ser más
precavido con eso, cuidarla, no transmitirle mis miedos, sino darle la
confianza y la destreza para irse comportando de manera más autónoma, por ahora
corre corre por aquí y por allá, saludamos a Jack el perro del vecino todos los
días, el único ser que logra calmarla cuando llora con sentimiento.
Dale, dale, dale, dale, dale...
Se intenta, se mantiene el sí, se permiten los cambios, las salidas, recambios, lesiones, y se sigue jugando, aunque quede solo en el juego. El vacío aparece y la emoción arrastra, a saber y meditar, aceptar que no todos tienen porque aceptar, a no sentirme mal cuando estoy solo, por enésima vez, como muchas veces lo he estado. A veces me pregunto cuando salen las cosas, cuando fluyen, porque la mayor parte del tiempo surgen obstáculos, esto o lo otro, que sí, pero no, que no pero si, que lo mismo pero diferente, que en esa estamos pero ya no estamos. Quizá es el aviso de algo que tiene que pasar, de oprimir el botón, de emprender el camino una vez más.
sábado, 13 de febrero de 2021
San Pedro de Cocholhue
En plena cuarentena, mientras el mundo enloquece por una pandemia y todo se vuelve extraño suceden cosas que recuerdan las cosas bellas de la vida. Llegó de Cocholgué, en manos de Cony, fue preparado por ella de la manera más sencilla y lo tomamos. Líneas dibujaron lo que vino luego, risas, dolores, y epifanías, pensamientos que vuelven y parecen asentarse, encontrando una posibilidad sobre la materia. ¿Cómo será? Quién sabe. Lo importante es que viene derechito, con freno de mano, cautela y firmeza, porque lo que ha sido es, y lo que San pedrito mostró eso es, no es otra cosa, es eso.