Ensayo y ensayo. Entonces la cosa queda así, en el centro de
la tesis deben quedar los conocimientos tradicionales, es el concepto clave,
por una simple razón, porque para mí eso es sabiduría, es una puerta
multidimensional que quiero conocer para mi propia edificación espiritual,
vital, familiar, como ser humano, por eso está en el centro, y eso lo leyó
Eduardo muy bien, no hay que perder el norte de lo que verdaderamente nos mueve
por dentro, y mi norte siempre ha sido no la academia o la ciencia sino la
búsqueda de Dios, lo espiritual y eso se debe conectar a la tesis, hay esta mi
corazón vibrando. Esa conexión con la sabiduría, tal como se aprende con los
abuelos y en la vida de las comunidades del Amazonas, conocimientos de cómo
vivir, ser persona y llevar una vida floreciente, humilde, cuidadosa, que no está
detrás de egos estúpidos de querer demostrar hacer llover, sino de encontrar la
sabiduría divina, la buena palabra, la palabra de vida, esa misma conmoción que
siento es la que sienten muchas personas que ven en esto algo muy importante,
tan importante que debe ser conocido, ensalzado, echarle porras, y sobre todo
experienciarlo, sino se hace eso, se esta apenas hablando de cualquier cosa, la
búsqueda es seria, profunda y comprometida, es el mandato que Dios me ha dado. La
humanidad se vuelca a su rescate, a su documentación, entonces lo percibe, lo
describe, genera sus impresiones y empieza un largo camino de encuentro que
tiene todos los tintes, enamoramiento, juzgamiento, salvación, perdición y asi,
el conocimiento tradicional se vuelve todo para la sociedad occidental y es
menester salvarlo antes de que pase lo que todos sabemos que va a pasar en el
plano físico, pero bueno esa es otra historia, el hecho es que salimos a
recorrer selvas, a hablar con abuelos, a encontrarnos con personas que se interesan
también por conocer esto, por escarbar en ciertos misterios que al fin de
cuentas no son ni tan misteriosos, ya que lo raro es que hayamos decidido vivir
con un velo puesto de materialidad y posesiones. Y así mismo como nos
comportamos, de la manera más paradójica, con eso que tanto amamos que son las
cosas, pues resultase que poco a poco nos vamos quedando sin esos bosques,
ríos, aguas, animales, todo lo vivo que conocemos, y lo cambiamos por otros
organismos mas simples y burdos, que deben toda su auutoreproducción a
inyecciones de petróleo y de carbón, grandes dosis de energía para cerebros tan
inteligentes que nos están llevando al cadalso y sin agüero. Pero en fin, hay más
puntos, esa valoración se vuelve una cosa así, como pongámosle precio, porque
para que importe debe tener precio, y así, pues la cosa no va pa ningún lado,
entonces hagámosle diferente, dejemos que la gente se exprese con sencillez,
que viva los importantes intereses de occidente como si también fueran los
suyos, al fin y al cabo es cierto, comparten intereses, por todos los lados se
quiere salvar el planeta, hasta el que más lo destruye también lo quiere salvar,
nunca antes el deseo de salvar algo en común había sido tan amplio, el mundo
quiere salvar al planeta y lo único cierto es que lo hará, aunque sea ese
lugar, un lugar solo cierto después del paso de nosotros por estas vidas, lo
cierto es que nos vamos y nos estamos despidiendo, porque la vida eterna
definitivamente no es aquí. Esto suena muy bien, siento que libero algo y digo
la verdad, pero no es mas que mi propia verdad, o sea que posiblemente pueda
estar equivocado, o más bien seguramente equivocado. Mientras estemos vivos
siempre es posible no bajar la guardia, porque resultase que de las verdades
omito una, ese sueño de salvación paradisiaco y de descanso eterno ya comenzó y
es este momento, yo decido si vivo en el paraíso o si lo hago en el infierno,
con mis actos y pensamientos, con la forma como vivo, con la sinceridad del
corazón, la humildad y el servicio que enseñan los profetas, y los abuelos en las
malocas, a ser personas que se ayudan los unos a los otros, que actúan de
manera consciente, cometen errores, los reconocen y somos capaces de sanarlos,
asi la vida sigue y es posible. Por eso no hay que temer, los conocimientos
tradicionales están en el centro de mi corazón y da pa conjurar lo que es y será
en esta historia.
miércoles, 3 de agosto de 2016
Jugar la tesis. Diario de campo 2016.
He pensado en estos últimos días en hacer de mi tesis un
juego, algo que quede, como un dispositivo social que invite a la integración,
a tomar consciencia de algo, un juego es una gran experiencia para quienes lo
juegan, por eso considero que si mi tesis se dirige a producir un juego, como
un producto, como lo es la feria, Los Mozzarella, y la vida en general, siento
que puedo aportar lo mejor de mi trabajo.
Del libro de Omar me quedan dos cosas: que es importante
entender las bases de lo que podrá llamarse la desinvención del capitalismo en
aras de una alternativa mas acorde a los limites de la naturaleza, de la
biomasa planetaria. Por supuesto que es una empresa que no pinta ser un jardín
de rosas para nadie, por eso mismo es importante buscar los zapatos en el
armario, y no debajo de la cama, como lo dice Omar, refiriéndose a si realmente
queremos que los zapatos estén en el armario pues hay que ocuparse de ello, porque
tiene sentido. Ese razonamiento es mi principal dilema en esta experiencia, sin
embargo, he decidido pedir prestado un momento que nos lleve a a desaprender formas
de consumismo agroindustrial, de tiempos que se equivocan, o grupos que se
roban a si mismo. Con el juego, además de discutir operaciones sociales para la
administración y la organización en los territorios, se pretende dejar un
mensaje de aprender a vivir con mesura material, a ocuparse en la acción de nosotros
mismos y nuestro entorno.
En esto de resignificar las interfaces simbólicas, las
relaciones que nos conectan y nos hacen sentir parte de un nosotros, un juego puede
ser un artilugio que nos devuelva al momento en que no sabíamos nada, o sea que
éramos sabios, bebes, y mas aun al origen de la vida, que Jose Arguelles se
refiere como el Holon Aborigen,o el
Eterno Retorno de Nietzsche (). Un juego es una buena oportunidad para que la
gente se reúna y de manera interesada o desintersada construya su propio juego,
sus códigos sociales, principios, sobre los cuales conjurar la vida social.
Clifford Geertz describe de manera magistral esta metáfora
del juego, cuando señala a los actores sociales como jugadores en un campo,
jugando un juego, que aunque su finalidad no sea muy clara su estructura si lo
es, dándole sentido a la trama, a la historia, al drama social, ese que se
presenta generalmente en términos de conflicto y de conciencia. Clifford Geertz
nos da el permiso de adentrarnos en una trama que trate de temas serios, con el
lenguaje del juego y el drama, que los personajes sean quienes tratan de
ejercer alguna influencia, consciente o inconsciente, sobre las personas, bosques,
animales, y ríos que son y crean la noción de territorio amazónico.
Los jugadores serían: las organizaciones indígenas, los
institutos gubernamentales, y no gubernamentales. En la escala local están
ASOAINTAM, ASMUCOTAR, CIMTAR, EI Villa Carmen. En esto se evalúan los
mecanismos de reproducción de los saberes tradicionales y locales. A un nivel
regional está el Sinchi, Corpoamazonia, la OPIAC, la Gobernación del Amazonas,
la Universidad Nacional de Colombia, Sede Amazonia, Fundacion Gaia, Tropenbos.
A un nivel nacional esta Parques Naturales Nacionales, el Ministerio del
Interior, ONIC. A nivel internacional esta la ONU, PNUD, ACT.
La interacción de estos jugadores puede ser analizada como lo
propone Bourdieu, como acciones y estrategias de juego (enjeux). Los jugadores son quienes definen en gran medida las
políticas de conservación de la biodiversidad, las de pueblos indígenas, y
minorías. Al ser jugadores del mismo campo, hay una distribución de las
posiciones según las apuestas, e intereses en el campo. Son ellos quienes se
han convertido en los actores de la historia que tiene en sus manos las
políticas sobre los territorios, las etnicidades, y la agrobiodiversidad, todos
estos por supuesto son conceptos que se convierten en sujetos políticos tras
ejercer una influencia sobre los otros jugadores, desprovistos de los capitales
que tienen estas instituciones, pero que cuenta con otros. Cada jugador tiene
capacidad de concebir una idea sobre el nosotros, sobre las fronteras de su propia
geoetnicidad, y acerca de los otros como sujetos con identidad.
Las organizaciones indígenas tienen el poder de ser quienes
conocen mejor el territorio, traen las banderas de la reivindicación tras mas
de 500 años de conquista, esclavitud y colonialismo, eso les da argumentos convincentes
ante, por ejemplo, quienes representan la reproducción y evolución de las
instituciones coloniales en forma de gobiernos nacionales y su correspondiente
política social, educativa y religiosa. Un conjunto de fuerzas encarnados en
forma de unas elites que ostenta el monopolio del uso de la fuerza sobre un
territorio, y en parte de las libertades que conceden a los otros para que se
integren y sirvan a su sistema. La dicotomía que quiero resaltar aquí es que
mientras unos aparentemente representan un statu quo, legitimo por el uso de la
fuerza, los otros representan quienes le hacen frente a la opresión de quienes
llegaron de Europa, y sus descendientes en América. Provienen de marcos epistémicos no solo
diferentes, sino contrarios en muchos puntos.
Esta condición, reconocida por muchas
de esas instituciones como los principales causantes de la marginalización
social de muchos indígenas en las ciudades y campos, sujetos a condiciones de
tener que escarbar en la basura de los blanco para sobrevivir, son las
organizaciones que se mueven como intermediaciones, bajo la idea de devolver y
restituir a quienes han sido expoliados, en este caso, los indígenas. En esta
zona del campo se mueven las ONG, los
institutos de Investigación, la Academia, y las instituciones sociales del
Estado, la iglesia, para justificar sus múltiples acciones en territorios, cada
uno a su estilo por supuesto. Los jugadores están sobre el tablero, y se
convierten en la urdimbre que teje significados, movimientos, la influencias y
marcos epistémicas sobre lo indígena, lo étnico, y lo que se conoce como
tradicional.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)