Encuentros
que suceden historias que se cruzan, guaimaronadas que guaimaronean, y la cosa
sigue como si nada, un poco de interaccion, de buena intención, no es acaso lo
que se vino a hacer canción? Asi que para que pensar aunque mucho se piense
para no pensar, en estructura y conjuración, desarmo lo que esta armado, y dejo
que las cosas se vayan por donde deben de irse, cierro las fugas de fotones, y
asi la cosa mas sabrosa si se siente, respiro y agradezco, pido la transmisión
de la energía espiritual, con el timón a donde quiera ir, con el freno cuando
deba de ser, porque el camino es sinuoso y mucho lo gracioso.
En
los albores del paseín, la frugalidad Silvigilio Jasopa encontró, en los
verduscos de una selva, en los puentes de algodones, en la oscuridad de la
noche y la luna a media vez. Frigoríficos trenseados, un humillo se ha
expirado, para tiempos y de canción, una gran cosa le puso mansión. Sin
miedillo a palpitar, a sonreír y a imaginar, que fue un encuentro casual y así
nos sucedió. Silvigilio aquella noche no pudo dormir, de jasopas no se vino, y
a las frias noches se entrego, mientras la nube iluminada, el cielo mucho lo
estrellado, que venga al sieso y a la marcha, a la juterada y que se haga la
chichada. Vidas hermosas de fragancia, de nardos, petalos y talcos, coqueteos
de olores, simpatías y rosquejes, son los tiempos de Silvigilio, caminando
dulce y sin mirar jardín, con las rosas de sus lados, y las manitas dobladitas,
corre y canta en el jardín, un, dos, tres hay pobre rosquejin.
Quien
sabe como vengan, las peripesias de un periplo, que se ha vuelto en viajesitos,
en misiones y canciones. De un brinco en Ciateli, Silvigilio una familia se
encontró, con todos le fue bien, y a todos siempre acometió. Pues de sus
guaimaronadas no se le tiene duda y de su valentía asi tampoco, y aunque mucho
tiempo en penserias, mucho mas en accionerias, de los espiritus no se olvido, y
al mismo Dios agradeció, Silvilio Jasopas pa delante, que el encuentro se hace
adentro, en el ser de ser, divinito, y de Bohutu mismo, YLOHIM, y hay que ir,
alejar los culillos y a entregarse a la virtud, de agradar y dar, decir lo que
no decir, soltar la sinhueso asi el perro tenga el hueso.
Y
aunque miedillos se recorran, le hace bronca y lo encacorra, Silvigilio
alebrestado, con un bribón se ha tropezado, y aunque el camino sobre el puente,
el mismo se hizo al diente, Silvigilio no se quiso mover frente a la rudeza del
acomoter, Matías Ropiño, uno de los orangutanes montadores del ecosistema se le
acercó, limnologicamente y sin sociológico cuidado se inmutó, como tigre
respondió, y un gruñir le surgir. Uuuuaaaaauuuuuu, la misma fiera alebrestó,
sálvense quien pueda porque Matias Ropiño les da a todos por el jopiño, y
obviamente po’ el chiquitiño. A la lona, a la esquina, contra la baranda y la
jeta blanda, voltiando el mueco como Rocky cuando Mario Baracus le dio en la
jeta, no sé que le paso, yo pensaba que el era bueno, al menos eso hacía
parecer en los Magníficos.
Los
artistas de escondite, los ingenios de los brutos, la juerga que se juega, y
todo aquí se desapega, se sueltan los ladrillos, se endereza la espaldilla, y
no que otra maricadilla me hace faltilla. Pero el hecho es que sin bramar, sin
pretender ni contradecir, se hace mas sin hablar mas, al tacto Silvigilio, dio
concilio con impacto. Cinco palabras pronuncio, tres letras sin andar, los
puntos rodeaban, las comas se comían, ahí de nuevo el viento, hay de mas el
comapan, la mermelada se acabo, y la mantequilla ya no tiene colesterol,
recuerda aquella canción, que la abuela le enseñó:
La
leche ya no es leche,
Lo
que es ya no es,
La
morcilla ahora es light
El
mayor riesgo es comprar,
La
valentía es mercadería
Y el
café viene sin la cafeína,
A
donde fue aquel lugar
Que
el olvido no olvidó
Que
la memoria guardó
Y
ahora me durmió.
La
limnología si se lo decía, son trozos de los ríos y piedras que este arrastra, si
el rio suena es porque piedra trae, Silvigilio si había sido advertido por su
amigo Wanted Lorenz, quien a pesar de caracterizarse por ser un rompedor de
reglas profesional, a veces se tornaba desafiante haciéndose el revolucionario,
Silvigilio y Wanted por la Facultad cabalgaron, derrotando al enemigo,
Sabrocito era su complice, un profesor aventajado que en la estrategia se
reconocería, pues cuentase de este infame, que dibujaba cascaritas en el
tablero anunciando asi la trampa, del chequeito, o de la pilladita, siendo Sabrocito
profesor simuleaba el bravear, cuando encontraba a Silvigilio Jasopa, con
Matias Ropiño y Wanted Lorenz, pilatuneando, cafresiando, lo que es lo mismo de
mucho divertinsiando, pues que sea lo que sea, la juerga era tomada en serio. Sabrocito,
esta casado con Bevajeno Grosjean, la futura heredera del imperio Grosjean, un
feudo que crecía increíblemente en la era de las empresas modernas, pues hasta
el ultimo suspiro su padre Landro Grosjean mantuvo asi la cosa, y se
reconocería por su gran audacia.
Landro Grosjean, dejando la
sabiduría de los años pasar, mas pericia este adquiria, y mientras su cuerpo
envejecía, sus ojos veían lo que antes no veía, sus oídos decían lo que el solo
escuchaba, con todo esto el señor Grosjean, se haría pedagógico, o mas bien un
poco menos lógico, sea lo que sea bendecido este locógico venido de las mismas
montañas de Zasuigico. Su sequito, lo componía una familia amplia y numerosa,
virtuosa y bejucosa, a los que eran como Silvigilio lo buscaban, pero lo perdonaban
porque lo entendían, a Ropiño casi no lo dejan, pasar al otro lado del túnel, a
donde la libertad dio su primer respiro a tremendo entrenamiento.