sábado, 24 de febrero de 2024

Quizá un buen paso es no hacer lo mismo

A hoy son casi 8 meses desde que no consigo un trabajo, sin embargo, no he parado de trabajar. A hoy, el trabajo que he creído ser mi trabajo ya no se si es mi trabajo, pues mucho de lo que hago tendrá resultados de admiración, pero no he devengado un solo peso de ello. Cuando escribo esto el corazón y el pecho se me dilatan, no entiendo, las certezas se diluyen, y las posibilidades que en algún momento vi a mi alrededor se esfuman. Veo que todo el mundo trabaja, todo el mundo encuentra algo que hacer, creí que yo era de esos, pero recorro los pasos de incertidumbre. Debe ser que aún no se quién soy, debe ser que no he encontrado mi lugar en la vida, y eso no me afana, pero tengo hijos y dos padres que mantener. Pero quien entiende, a quien le importa, al fin y al cabo, es mi problema, que será el problema de mis hijos y es ahora el problema de mi papa y mi mama. No entiendo, como puede ser posible que alguien que trabaja todos los días de su existencia no vea los frutos de su trabajo. Como salir de esto, me pregunto, como darle la vuelta y buscar los pasos que solo mi existencia puede recorrer. No repetir ni dejarme influenciar por lo que viví en mi casa desde pequeño, viendo a dos papas quejándose de que no conseguían trabajo, de ver que sus amigos eran ricos y ellos pobres, a un hermano avergonzado, y a mi perdido en ensoñaciones que evadían esa cruda realidad de la cual no quería saber nada. Tengo fe, debo afrontar con entereza lo que está causando este estancamiento, debo romper el sino familiar de andar quejándome y vaciado, debo ser agradecido y tener la fuerza para transformar mi vida como muchas veces he demostrado que lo puedo hacer. Quizá un buen paso es no hacer lo mismo, lo mismo que me hace creer que no voy a ningún lado, quizá lo mejor es cerrar los anhelos, o las proyecciones que no me corresponden. Es un momento difícil de mi vida, que sin embargo es feliz por muchas cosas, realmente es más feliz que difícil, solo que el verme a mí mismo sin trabajo y mantenido me aterra. Será mi ego, pero no solo eso, sino el afán de saber que tengo un papa y una mama que cayeron en la pobreza, que los mantienen y que prácticamente viven de la caridad. Esto lo escribo para mí, para decirme y acordarme que no soy otra persona, ni un destino familiar, soy yo y asi mismo lo he construido, doy un salto, soy alguien, tengo trabajo y respondo por lo que me comprometí y escogí, mi familia, yo miso, mis sueños y gustos.

No hay comentarios: