jueves, 9 de septiembre de 2010

Vientos del sur.

Soplan y soplan los vientos del sur, el gran espíritu se ha aparecido entre el sueño y el despierto, la suerte está echada solo es un camino, delgado y punzudo, pedregoso y amoroso, es difícil enrutarse pero una vez se empieza a caminar es fácil caminarlo, ahí va tu destino a los vientos del sur, ahí va la cosa se hace real, la unión de los tiempos y el clamor de los milagros, se viene por fin te siento aquí cerca, hablar a mi alma, guiar mi destino, nuevas tierras y espíritus al paso aprenderé, para cuando abras la puerta del imperio del Perú y traigas el legado de Atahualpa el servidor, y cures esa llaga que quedo cuando Cortes lo ejecuto, no sin antes aquí poner la semilla de la preciada conservación, en la amazonia tierra verde, de elementales graciosos y cuidanderos del bosque, por tierras de hombres venidos de Italia, migrantes revueltos con indio araucano, tierras altas de Bolivia que revuelven nuestro destino y pasa a ritmo de Los Mozzarella, porque a su lado te quiero, del lado de Dios y no de los humanos. Las tinieblas se abran mi mente despierta, mi corazón está abierto y quiere ayudar a que este mundo hundido crea en la vida, porque es un milagro y la misma le ofrezco, por cada gota de esfuerzo en cada pensamiento, no veo como mas se puede aquí hacer pues del miedo yo no quiero saber, para los estables y asegurados de la vida, que el seguro social les de la felicidad, pero yo mi vida se la doy al que me la dio y solo asi puedo vivir.

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