viernes, 5 de marzo de 2010

Debo que debo!!!

En el verde amazoneño, en la mente que habla, en el pecho que siente, en los dientes que mascan, en los dedos que tocan y las palmas que chocan, en los labios que besan y las lenguas que prueban, en los días sin sol y las noches sin luna, en el fin del tropiezo y el comienzo del camino, ahí fue donde todo se hizo a donde por primera vez lo vine yo hacer, entonces me dije, no entiendo ni un pito, entonces respondo, pues no entienda ni mierda, venga que venga, que me quiero soltar, quiero dejar el miedo a escribir, hace ya varios días, no sé si semanas en que me encuentro exiliado en un lugar que no he ido, pero mis pensamientos se escapan, y los dedos no alcanzan, hago esto y adivino lo otro, lo imposible por volver al recuerdo que crea, al presente escuchado y palabras que hablan a los espejos que tengo del reflejo de ahora. Y el dolor se hace, me visita y disfraza, es un ademan de desprecio y un gesto sin lucha, me rindo todos los días y concluyo lo mismo, debo escribir, debo producir, debo ser útil, debo servir, que será lo que pasa que fácil me ausento, me encapsulo en burbujas y me olvido de todo, mañana de nuevo un día más se habrá ido, y una conclusión habrá al final del camino, no se puede perder la energía vital, no se debe botar la vida así no mas, lo digo porque infrinjo este principio vital, no se porque estoy acá, no se porque me iría para allá, pero todo se da, cuando en devoto se viene, que mas da que la ascesis, aprender a vivir, encender la lámpara y otras también, ayudar a los otros, ayudarme a mí mismo.

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